viernes, 31 de enero de 2014

LEVANTAMIENTO - I

Antes de cerrar este capítulo sobre manejo de materiales, regresemos al tema del levantamiento. Al principio dijimos que la lesión de espalda, casi siempre por el levantamiento de cosas, es una de las lesiones compensables más grandes. Las lesiones por levantamiento son muy complejas y difíciles de
controlar. Naturalmente, el peso levantado es importante, pero muchos otros factores determinan la ocurrencia de una lesión. Incluso el levantamiento de un peso ligero, digamos tres o cinco kilos, puede causar lesiones graves de la espalda si las condiciones son buenas (o más bien malas). También es importante la condición física de quien levanta la carga. Hemos insistido en la técnica, y se escucha con frecuencia la conseja: "levanta con las piernas, no con la espalda". 
Pero es una regla más bien difícil de seguir, porque somos capaces de levantar más peso con la espalda que con las piernas. Levantar con las piernas requiere acuclillarse y después alzar tanto la carga como el cuerpo. Para cargas pesadas, esto requiere de mucha fuerza en las piernas, y es especialmente difícil si el trabajador no está acostumbrado. 
El entrenamiento y el ejercicio con pesos ligeros ayudan a adquirir la técnica, pero hay todavía otras desventajas. Chaffin y Park (ref. 16) han demostrado que, si la forma de la carga es tal que deba ser traída frente a las rodillas, levantar con las piernas aumenta la compresión en la parte inferior de la espalda. Otra cosa que la tan citada regla ignora es el hecho de que levantar con las piernas consume hasta 50 por ciento más de energía que levantar con la espalda, sobre todo cuando la carga es ligera y mayor la frecuencia de los levantamientos.

jueves, 30 de enero de 2014

Transportadores de tornillo

Los transportadores de tornillo pueden ser muy peligrosos. Su mismo principio de operación consiste de un punto de pellizco en la entrada. Una complicación del riesgo es el hecho de que, a fin de operar a toda capacidad, la entrada debe estar completamente sumergida en el material que se transporta. Aquí, "sumergida" también quiere decir oculta, así que en la entrada hay un riesgo invisible. Finalmente, en muchas aplicaciones quizá sea necesario que el trabajador esté lo bastante cerca del transportador de tornillo, a fin de palear o distribuir el material a la entrada. 
Una manera simple y eficaz de proteger a los trabajadores es encuadrar el área de entrada en un pequeño confinamiento de rejilla que permita el paso del material, pero que mantenga dedos, manos y pies afuera. Si incluso una pantalla de malla grande es demasiado fina para permitir el paso del material, puede ser necesario un confinamiento con aberturas mayores, a veces lo bastante grandes para admitir un dedo o un pie. 
Este confinamiento también se vuelve seguro haciendo el recinto tan amplio que el trabajador no alcance a introducir manos o dedos en la zona de peligro, aun si las aberturas son grandes. Este método obedece a principios de protección en maquinaria que estudiaremos con mayor detalle en el capítulo 14.

miércoles, 29 de enero de 2014

Transportadores aéreos

Las piezas grandes de aparatos o de vehículos son manejadas a menudo por bandas transportadoras aéreas. Ganchos, sujetos a una cadena en movimiento, soportan cada artículo mientras se mueve. Estos transportadores son particularmente más adecuados para productos que tienen superficies delicadas o con terminados, debido a que tienen muy poco contacto. Por la misma razón, los transportadores aéreos son muy útiles para la pintura por pistola o las operaciones de terminado. 
Los transportadores aéreos evitan muchos de los riesgos de los transportadores de banda puesto que desaparecen muchos de los puntos entrantes de pellizco y las partes móviles están lejos del alcance de los trabajadores. Pero tienen sus propios riesgos, como que dejen caer los materiales al piso o a las estaciones de trabajo. Las pantallas o guardas sirven de protección, pero no completamen te, porque las piezas móviles deben ser accesibles en las estaciones de trabajo para su procesamiento Una buena práctica es colocar pantallas o escudos bajo el transportador siempre que pase por un pasillo u otra área donde es posible que se reúna personal. Otro buen lugar para pantallas es donde cadena del transportador sube o baja un gradiente. 
Tales movimientos hacen que las cargas cambien de posición en los ganchos y aumentan la posibilidad de que se caigan. La figura 13.13 muestra tres orientaciones para los ganchos o colgadores que soportan las piezas de trabajo acarreadas por los transportadores aéreos. Observe cuán más segura es la orientación en la cual el trabajo se sostiene frente al gancho. Si el trabajo topa con una obstrucción, es más probable que el trabajo que está frente al gancho se atore y detenga al transportador. Si el trabajo va detrás del gancho, una obstrucción puede alzar y tirar la carga.

martes, 28 de enero de 2014

Transportadores de banda

En transportadores de banda se ven puntos de pellizco de recorrido por todas partes. Se requieren poleas para mover la banda, cambiarla de dirección, sostenerla y tensarla. Uno de los lados de toda polea es un punto de pellizco de recorrido. La defensa contra este riesgo consiste en uno de tres métodos: aislar los puntos de pellizco, instalar guardas e instalar dispositivos de disparo de emergencia. El mejor método de protección es aislar el punto de pellizco de recorrido, de forma que ningún empleado quiera ni pueda entrar al área de peligro. 
Si el aislamiento no es práctico, a veces se coloca una guarda para mantener lejos el cuerpo o las extremidades del trabajador. El diseño de la guarda varía según la aplicación, y en ocasiones es difícil hacerla práctica, porque interferiría con la operación del transportador. Debido a la geometría del cuerpo, la distancia a la zona de peligro es un factor de diseño al construir las guardas, un principio que estudiaremos con más detalles en el capítulo 14. Si tanto el aislamiento como la protección son imposibles o no son prácticos, hay que proteger a los trabajadores con alguna clase de mecanismo de disparo de emergencia. Se puede poner un alambre o una cuerda a lo largo del transportador, de forma que si un trabajador cae a la banda pueda aferrar el alambre de disparo y detener la máquina. Por desgracia, este método requiere una acción pertinente de un trabajador o un compañero alertas.

viernes, 24 de enero de 2014

TRANSPORTADORES

Los riesgos de los transportadores pueden ser bastante serios, y los trabajadores están más conscientes de estos riesgos que de los de otras máquinas. Pareciera como si todos lleváramos impresa en algún lugar de la imaginación la imagen de estar atados al transportador de una aserradora, a punto de ser cortados a la mitad. La verdad es que los trabajadores a veces quedan atrapados en bandas industriales y no sólo mueren, sino que quedan desmembrados e incluso pulverizados más allá de lo reconocible. 
El horror de este hecho inspira un saludable respeto por parte de la mayoría de los trabajadores hacia los transportadores industriales. En contraste, algunos de los peores riesgos de los transportadores tienen una apariencia muy inocente. Los puntos entrantes de pellizco, que por sí mismos quizás ni siquiera lesionen seriamente una mano o un brazo, pueden iniciar un proceso irreversible una vez que el empleado está atrapado, y lo jalen al interior de la máquina. Particularmente la ropa suelta puede quedar atrapada, y el empleado, antes de recibir el más mínimo daño, está definitivamente condenado.

lunes, 20 de enero de 2014

Las eslingas - Caso

Dos trabajadores inexpertos tenían la tarea de levantar un paquete de 12.20 metros de acero acanalado. La cuestión era en dónde sujetar los ganchos de levantamiento a la carga, y eligieron una solución basada en su experiencia con las cargas con las que estaban familiarizados, a saber, las que levantaban a mano. Les pareció que los pesados sujetadores de acero que aseguraban el bulto eran un punto de sujeción natural. Pero estos sujetadores no estaban diseñados para sustituir a las eslingas. Su resistencia era insuficiente y el ángulo de sujeción era agudo. El ángulo de la sujeción siempre será agudo cuando se utilicen de este modo los sujetadores de carga, dado que para realizar su trabajo deben estar apretados. Cuando levantaron la carga, uno de los sujetadores cedió y la carga aplastó a uno de los trabajadores.

Las eslingas - Caso

Dos trabajadores inexpertos tenían la tarea de levantar un paquete de 12.20 metros de acero acanalado. La cuestión era en dónde sujetar los ganchos de levantamiento a la carga, y eligieron una solución basada en su experiencia con las cargas con las que estaban familiarizados, a saber, las que levantaban a mano. Les pareció que los pesados sujetadores de acero que aseguraban el bulto eran un punto de sujeción natural. Pero estos sujetadores no estaban diseñados para sustituir a las eslingas. Su resistencia era insuficiente y el ángulo de sujeción era agudo. El ángulo de la sujeción siempre será agudo cuando se utilicen de este modo los sujetadores de carga, dado que para realizar su trabajo deben estar apretados. Cuando levantaron la carga, uno de los sujetadores cedió y la carga aplastó a uno de los trabajadores.

sábado, 18 de enero de 2014

Las eslingas - III

La selección de la eslinga apropiada para determinada aplicación comprende diversos factores, además de la carga nominal. También hay que considerar la naturaleza del artículo que se va a levantar, su terminado superficial, la temperatura, el costo de la eslinga, y el ambiente. En general, el gerente de seguridad e higiene no es la persona que toma la decisión, pero hay cada vez más razones para concederle un voto sobre lo que se hace en esta área. La mayoría de los superintendentes, supervisores y trabajadores que manejan materiales no están conscientes de la cantidad de normas federa- les que sientan los criterios de selección de eslingas. 
De hecho, muchos ni siquiera entienden claramente el mecanismo de los riesgos que rodean a las eslingas industriales. Por tanto, se recomienda al gerente de seguridad e higiene que aporte su asesoría y consejo en la selección y uso de eslingas industriales, en el interés de la seguridad de los trabajadores. Para algunos criterios, como la señalización de cargas, procedimientos de reparación, ensayos de prueba y temperaturas de operación, los requerimientos para las diversas eslingas no son idénticos e incluso varían de manera curiosa. Algunas de estas variaciones se deben a las diferencias físicas de las eslingas; otras se deben a los diversos orígenes y motivos de los requerimientos. La tabla 13.3 resume algunas de las diferencias más curiosas entre los requerimientos para las diferentes clases de eslingas. No está de ninguna manera completa; por ejemplo, no se perminten las eslingas de red de nylon en presencia de ácido o de vapores fenólicos. En el caso de los vapores cáusticos, tampoco se autorizan las eslingas de red de poliéster y polipropileno ni las que tienen acoplamientos de aluminio. 
El gerente de seguridad e higiene se valdrá de la tabla 13.3 como una primera revisión en sus inspecciones en la planta o para su decisión de compra; después, deberá verificar los detalles en las normas. No obstante, insistamos en que la habilidad y la capacitación del trabajador que manipula la eslinga para sujetar la carga es más importante que todas las detalladas especificaciones y las normas. Éste es un buen lugar para que el lector reflexione sobre la muerte referida en el caso 13.2.

Las eslingas - III

La selección de la eslinga apropiada para determinada aplicación comprende diversos factores, además de la carga nominal. También hay que considerar la naturaleza del artículo que se va a levantar, su terminado superficial, la temperatura, el costo de la eslinga, y el ambiente. En general, el gerente de seguridad e higiene no es la persona que toma la decisión, pero hay cada vez más razones para concederle un voto sobre lo que se hace en esta área. La mayoría de los superintendentes, supervisores y trabajadores que manejan materiales no están conscientes de la cantidad de normas federa- les que sientan los criterios de selección de eslingas. 
De hecho, muchos ni siquiera entienden claramente el mecanismo de los riesgos que rodean a las eslingas industriales. Por tanto, se recomienda al gerente de seguridad e higiene que aporte su asesoría y consejo en la selección y uso de eslingas industriales, en el interés de la seguridad de los trabajadores. Para algunos criterios, como la señalización de cargas, procedimientos de reparación, ensayos de prueba y temperaturas de operación, los requerimientos para las diversas eslingas no son idénticos e incluso varían de manera curiosa. Algunas de estas variaciones se deben a las diferencias físicas de las eslingas; otras se deben a los diversos orígenes y motivos de los requerimientos. La tabla 13.3 resume algunas de las diferencias más curiosas entre los requerimientos para las diferentes clases de eslingas. No está de ninguna manera completa; por ejemplo, no se perminten las eslingas de red de nylon en presencia de ácido o de vapores fenólicos. En el caso de los vapores cáusticos, tampoco se autorizan las eslingas de red de poliéster y polipropileno ni las que tienen acoplamientos de aluminio. 
El gerente de seguridad e higiene se valdrá de la tabla 13.3 como una primera revisión en sus inspecciones en la planta o para su decisión de compra; después, deberá verificar los detalles en las normas. No obstante, insistamos en que la habilidad y la capacitación del trabajador que manipula la eslinga para sujetar la carga es más importante que todas las detalladas especificaciones y las normas. Éste es un buen lugar para que el lector reflexione sobre la muerte referida en el caso 13.2.

Las eslingas - III

La selección de la eslinga apropiada para determinada aplicación comprende diversos factores, además de la carga nominal. También hay que considerar la naturaleza del artículo que se va a levantar, su terminado superficial, la temperatura, el costo de la eslinga, y el ambiente. En general, el gerente de seguridad e higiene no es la persona que toma la decisión, pero hay cada vez más razones para concederle un voto sobre lo que se hace en esta área. La mayoría de los superintendentes, supervisores y trabajadores que manejan materiales no están conscientes de la cantidad de normas federa- les que sientan los criterios de selección de eslingas. 
De hecho, muchos ni siquiera entienden claramente el mecanismo de los riesgos que rodean a las eslingas industriales. Por tanto, se recomienda al gerente de seguridad e higiene que aporte su asesoría y consejo en la selección y uso de eslingas industriales, en el interés de la seguridad de los trabajadores. Para algunos criterios, como la señalización de cargas, procedimientos de reparación, ensayos de prueba y temperaturas de operación, los requerimientos para las diversas eslingas no son idénticos e incluso varían de manera curiosa. Algunas de estas variaciones se deben a las diferencias físicas de las eslingas; otras se deben a los diversos orígenes y motivos de los requerimientos. La tabla 13.3 resume algunas de las diferencias más curiosas entre los requerimientos para las diferentes clases de eslingas. No está de ninguna manera completa; por ejemplo, no se perminten las eslingas de red de nylon en presencia de ácido o de vapores fenólicos. En el caso de los vapores cáusticos, tampoco se autorizan las eslingas de red de poliéster y polipropileno ni las que tienen acoplamientos de aluminio. 
El gerente de seguridad e higiene se valdrá de la tabla 13.3 como una primera revisión en sus inspecciones en la planta o para su decisión de compra; después, deberá verificar los detalles en las normas. No obstante, insistamos en que la habilidad y la capacitación del trabajador que manipula la eslinga para sujetar la carga es más importante que todas las detalladas especificaciones y las normas. Éste es un buen lugar para que el lector reflexione sobre la muerte referida en el caso 13.2.

Las eslingas - III

La selección de la eslinga apropiada para determinada aplicación comprende diversos factores, además de la carga nominal. También hay que considerar la naturaleza del artículo que se va a levantar, su terminado superficial, la temperatura, el costo de la eslinga, y el ambiente. En general, el gerente de seguridad e higiene no es la persona que toma la decisión, pero hay cada vez más razones para concederle un voto sobre lo que se hace en esta área. La mayoría de los superintendentes, supervisores y trabajadores que manejan materiales no están conscientes de la cantidad de normas federa- les que sientan los criterios de selección de eslingas. 
De hecho, muchos ni siquiera entienden claramente el mecanismo de los riesgos que rodean a las eslingas industriales. Por tanto, se recomienda al gerente de seguridad e higiene que aporte su asesoría y consejo en la selección y uso de eslingas industriales, en el interés de la seguridad de los trabajadores. Para algunos criterios, como la señalización de cargas, procedimientos de reparación, ensayos de prueba y temperaturas de operación, los requerimientos para las diversas eslingas no son idénticos e incluso varían de manera curiosa. Algunas de estas variaciones se deben a las diferencias físicas de las eslingas; otras se deben a los diversos orígenes y motivos de los requerimientos. La tabla 13.3 resume algunas de las diferencias más curiosas entre los requerimientos para las diferentes clases de eslingas. No está de ninguna manera completa; por ejemplo, no se perminten las eslingas de red de nylon en presencia de ácido o de vapores fenólicos. En el caso de los vapores cáusticos, tampoco se autorizan las eslingas de red de poliéster y polipropileno ni las que tienen acoplamientos de aluminio. 
El gerente de seguridad e higiene se valdrá de la tabla 13.3 como una primera revisión en sus inspecciones en la planta o para su decisión de compra; después, deberá verificar los detalles en las normas. No obstante, insistamos en que la habilidad y la capacitación del trabajador que manipula la eslinga para sujetar la carga es más importante que todas las detalladas especificaciones y las normas. Éste es un buen lugar para que el lector reflexione sobre la muerte referida en el caso 13.2.

viernes, 17 de enero de 2014

Las eslingas - II

Observe la siguiente progresión de capacidad de una cadena de aleación de acero de 1.25 centímetros, conforme aumenta el número de ramas:

Sola (vertical)
Doble (a 60° de la horizontal)
Triple (a 60° de la horizontal)
Cuádruple (a 60° de la horizontal)
5 625 kilos
9 750 kilos
14,500 kilos
14,500 kilos

Uno supondría que la capacidad de la eslinga se incrementa conforme aumenta el número de ramas o miembros de soporte. Pero observe que no aumenta la capacidad al pasar de tres a cuatro ramas. La razón estriba en que, al igual que ocurre con las sillas de cuatro patas, de hecho bastarían tres patas para soportar la carga. A veces, la distribución del peso puede ser igual entre ramas de la eslinga, pero usualmente la distribución no es tan perfecta. Conforme la carga se mueve de un lado a otro, es completamente posible que una de las cuatro ramas se afloje y que las otras tres soporten toda la carga. La cadena de aleación de acero, además de ser muy fuerte, es muy duradera y capaz de soportar el peso del trabajo al que las eslingas industriales están sometidas de rutina. La cadena ordinaria de acero al carbono que se vende en las ferreterías no sirve para eslingas. 
Las eslingas de cable de acero pueden ser tan fuertes como las de cadena de acero, pero el cable de acero es más susceptible de desgaste, pues sus alambres se rompen con mayor facilidad e inutilizan la eslinga. Para las eslingas de cable de acero también está especificado el número máximo de alambres rotos: no más de 10, distribuidos al azar en una trama del cable, o cinco en un cabo de la trama. Advierta que esta norma es un poco más estricta que la del cable de acero para grúas aéreas.

jueves, 16 de enero de 2014

Las eslingas - I

Las eslingas se utilizan para sujetar la carga a la grúa, helicóptero u otro medio de levantamiento. Las eslingas vienen en muchas váriedades y son muy importantes para la seguridad en el manejo de material. Por lo común, durante el levantamiento los componentes del montaje de la eslinga están sometidos a fuerzas mucho mayores que el cable de elevación y demás equipo. Debido a que la habilidad del usuario es de tanta importancia, a menudo las eslingas se manejan mal, lo que da por resultado que se dañen y maltraten más que los componentes de la grúa. 
El punto más importante por recordar para el uso seguro dc todas las eslingas es que los esfuerzos que se les aplican dependen en gran medida de cómo está sujeta la carga. La figura 13.12 muestra dos maneras de aplicar una eslinga para levantar cargas idénticas. Si cl ángulo dc las ramas de soporte de la eslinga es agudo, como en la figura 13.12b, se pierde la ventaja de las ramas múltiples. La causa más común de esta situación es una eslinga demasiado corta. La "capacidad nominal" de la eslinga es el límite de carga de trabajo en condiciones ideales; si la eslinga es colocada en ángulos de rama que no son los especificados en la tabla de capacidad nominal, ésta se reducirá mucho debido a la física de las fuerzas aplicadas. Por tanto, capacidad nominal es un termino que dice poco sin el dato del ángulo de las ramas.

miércoles, 15 de enero de 2014

Operaciones

La forma en que la grúa realiza el manejo y el movimiento en sí de la carga es una función de la habilidad, los conocimientos y el desempeño del operador y de los trabajadores que sujetan y aseguran la eslinga o el dispositivo de levantamiento. Como en el caso de los vehículos de motor, el operador de la grúa es cl factor más importante para impedir accidentes. 
Se requiere de una gran habilidad para sujetar la carga con seguridad, especialmente si se utiliza una eslinga (veremos las eslingas más adelante). El cable dc elevación no está destinado a atarse alrededor de la carga, y se dañaría si tal se hiciera, además de que es un soporte inadecuado para la carga. Colocar mal el sujetador, esto es, fuera de la línea del centro dc gravedad, puede provocar oscilaciones peligrosas cuando se levante la carga. Se tiende a pensar que se han eliminado los riesgos una vez que la carga está en el suelo, pero al soltar el sujetador también pueden ocurrir movimientos peligrosos del material capaces dc lesionar a trabajadores inexpertos o desprevenidos.

martes, 14 de enero de 2014

Desgaste del cable de acero - III

La norma del ANSI recomienda1 un procedimiento para contar los alambres rotos. La figura 13- 10 contiene un diagrama de los componentes del cable de acero y define los términos cabo y trama. Si hay más de 12 alambres rotos distribuidos aleatoriamente en un solo cabo en una sola trama, hay razones para cuestionar el uso continuo del cable dc acero. Un buen lugar para buscar alambres rotos es alrededor de las conexiones del extremo. A veces, un experto es capaz de evaluar la fuerza restante de un cable de acero deteriorado después dc su inspección. Esta posibilidad es reconocida por la norma del ANSI, que recomienda el recurso del buen juicio. Otra medida del estado de los cables de acero es la reducción de su diámetro por debajo del nominal. La figura 13.11 muestra que cuando se mide un cable de acero, el pie de rey puede colocarse en un pequeño diámetro o en uno mayor. La regla convencional para la terminología de cables de acero es utilizar el diámetro mayor para designarlo como diámetro nominal del cable de acero. La mayoría de la gente presta poca atención al cable de acero, pero no es asunto de poca importancia, considerando que anualmente se venden un cuarto de millón de toneladas de cable de acero.

lunes, 13 de enero de 2014

Desgaste del cable de acero - II

No es cosa fácil determinar cuándo es necesario remplazar un cable de acero. Los cables de aceros están formados por muchos alambres, que se rompen o cortan con facilidad. Casi todos han visto alambres rotos en cables de acero viejos, lo que nos lleva a preguntarnos si acaso no serán peligrosos. Los gerentes de seguridad e higiene no sobreviven mucho tiempo en sus empresas si van por allí ordenando remplazar cables de acero cada vez que encuentran un alambre roto. Y si llegan a sobrevivir, sus empresas no lo harán. Antes de profundizar en el asunto, debemos examinar ciertos principios básicos sobre cables de acero. 
De hecho habría que considerar que los cables de acero son máquinas, porque los alambres se mueven unos sobre otros mientras los cables de acero se flexionan; esto causa fricción y desgaste. Aún más, a menos que las hebras sean capaces de moverse apropiadamente durante la flexión, se somete a enormes esfuerzos de tensión a algunos alambres, que entonces se rompen. La herrumbre, los retorcimientos y otras clases de maltrato pueden interferir con el movimiento de los alambres y causar que los esfuerzos los rompan. Cuando se rompen algunos alambres, los esfuerzos de tensión sobre otros alambres se incrementan, y también acaban por romperse. En última instancia, la fuerza de la carga de la grúa será suficiente para superar la fuerza de tensión de todos los alambres que quedan, y el cable de acero se romperá.
Aun en los cables de acero bien mantenidos los alambres se desgastan, especialmente los exteriores. Conforme el desgaste provoca que el diámetro de cada alambre sea menor, la fuerza tensora aumenta el esfuerzo de tensión debido a la reducción del área transversal. Por tanto, un alambre desgastado también puede romperse debido a la concentración de tensión, incluso si no hay torceduras ni herrumbre y si los alambres se mueven adecuadamente para distribuir la carga entre todos.
Por razones obvias, el cable de acero está calculado en exceso y soportará más que su carga nominal. También es obvio que con el uso continuo todos los cables de acero tendrán alambres rotos. Éstos se toleran hasta cierto punto, pero después de ese punto el cable de acero se vuelve peligroso. La evaluación del grado de deterioro del cable de acero es incómoda y difícil, pero es necesaria para evitar una falla catastrófica.

domingo, 12 de enero de 2014

Desgaste del cable de acero - I

Las dos principales partes móviles de las grúas aéreas son el cable de acero y tambor y las poleas sobre las que viajan. Además, las ruedas del puente y el trole se mueven como lo hacen otros cuantos elementos de la grúa. Siempre que las partes se mueven y hacen contacto con otras piezas, están sujetas a desgaste. El desgaste en las ruedas del puente y trole acaba por provocar problemas, pero no es probable que cause una falla en la grúa. El desgaste en el tambor y las poleas es más peligroso, debido a los daños que puede generar en el cable de acero. Pero las poleas y el tambor desgastados solos no suelen ser la causa directa de una falla en la grúa. El cable de acero sigue siendo la parte móvil más crítica. Con el uso continuo, todos los cables se desgastarán y fallarán, un riesgo que no es tolerable. Se tiene que diseñar una manera de predecir la falla del cable de acero y retirarlo de uso antes de que ocurra una catástrofe.

sábado, 11 de enero de 2014

Inspecciones a grúas - II

Se necesita una inspección más completa de los componentes de la grúa a intervalos "periodos". En tanto que la inspección diaria dc los ganchos es meramente visual, la inspección periodo. requiere de un método más científico, como utilizar técnicas dc partículas magnéticas para detectar grietas. Las verificaciones exhaustivas del desgaste son más apropiadas también, como el uso c; indicadores en las poleas del cable de acero y en las catarinas dc la cadena. En general, laboratorios independientes, como Underwriters' o Factory Mutual realizan las pruebas de seguridad de la mayor parte de los equipos de las plantas. Pero la seguridad de una grúa es er. buena medida una función del método de instalación y de los ajustes apropiados en el sitio. Por tanto, se necesita una prueba de carga nominal antes de su uso inicial, para comprobar la capacidad nominal de carga de la grúa. Esto es un tanto complicado, porque si la grúa es sometida a una carga demasiado elevada, quizá falle, pero si no se hace así, ¿para qué realizar la prueba? Las normas especifican que la carga máxima durante la prueba debe ser 25 por ciento superior a la carga nominal de la grúa. Esto dará cierta seguridad de que soportará su carga nominal. Sin embargo, durante el uso no debe cargarse en exceso. Cualquier reparación o alteración mayor exige someterla nuevamente a prueba.

viernes, 10 de enero de 2014

Inspecciones a grúas - I

Casi todos están conscientes de las largas y quizá tediosas listas de verificación para la inspección de las aeronaves cada vez que van a despegar. Desde luego, la razón de las inspeciones (aun si son repetitivas y rara vez descubren algún defecto) es que las aeronaves no deben fallar de ninguna manera. En cierto sentido, las grúas son como los aviones: tampoco deben fallar. Con respecto a las inspecciones de grúas, las normas utilizan los términos frecuente o periódica para especificar cuándo se deben inspeccionar los componentes de las grúas. Esta disposición pretende evitar demasiadas especificaciones al decirle al patrono qué hacer y con qué frecuencia. En la figura 13.7 se ilustran algunos lincamientos generales con el significado de estos términos. Observe que hay una superposición, ya que las inspecciones mensuales pueden considerarse tanto frecuentes como periódicas. 
El fabricante de la grúa es una buena fuente para obtener una guía detallada sobre qué buscar en las inspecciones frecuentes. Estas inspecciones están a caigo del operador dc la grúa, así como los pilotos inspeccionan su aeronave antes de un vuelo. Está analogía entre aeronaves y grúas puede ser un buen punto de inicio para un tema de seguridad en un programa de capacitación para operadores de grúa. I-a rutina de inspección frecuente debe incluir una inspección visual diaria de las cadenas de levantamiento, más una inspección mensual, con un informe firmado. En el campo, el término cadenas de levantamiento ha sido muy mal interpretado, pues se le hace incluir las eslingas de cadena para manejo de la carga, cuando que hay una norma por separado para eslingas. La figura 13.8 identifica qué cadena es elevadora y cuál es eslinga. Los ganchos de la grúa tienen un trabajo pesado y son vitales para la operación segura de las grúas. Aunque su diseño suele ser superior, el daño o desgaste reduce cl margen de seguridad. En la figura 13.9 se ilustran los signos delatores de un gancho maltratado y peligroso.

lunes, 6 de enero de 2014

Cables y poleas - IV

Antes de abandonar el tema del cable de acero, conviene destacar el riesgo del efecto de latigueo. El cable de acero se ve tan pesado e inflexible que no parece normal que chicotee como látigo o como alguna cuerda de fibra. A cualquiera se le hace difícil visualizar las tremendas fuerzas de tensión en un cable de acero durante una operación de manejo de materiales, hasta que el cable de acero se rompe. La mayoría de los trabajadores nunca han visto lo que sucede cuando esto ocurre; quizás esto explica por qué tantos trabajadores permanecen demasiado cerca mientras la cuerda es tensada por la carga. El riesgo es muy serio, y un accidente grave muy probablemente dejará lesiones y muertes.

domingo, 5 de enero de 2014

Cables y poleas - III

Una manera de no sobrecargar el cable de acero y la grúa consiste en poner un motor de malacate que no desarrolle suficiente par de torsión como para sobrecargar la línea. La combinación de tal motor de malacate y el enrollado correcto para el diseño de la grúa hará que nunca se sobrecargue. Con este arreglo, la grúa será incapaz de levantar cualquier carga que la dañe o que exceda su factor de seguridad. La mayor parte de las grúas aéreas actuales están diseñadas de este modo. Qué bueno sería que la espalda humana tuviera esta característica de diseño. Siempre que se enrolla un cable en un tambor, la abrazadera de ancla del extremo del cable soporta muy poca carga cuando hay varias pasadas en el tambor. La fricción del cable sobre el tambor sostiene la carga. Pero si el tambor se desenreda hasta menos de dos vueltas, una carga peligrosa sobre la abrazadera del ancla puede originar una falla, y el cable de acero se soltará del tambor. Por lo regular, la grúa aérea está organizada de forma que, incluso si el motón de carga está apoyado en e¡ suelo, queden varias vueltas en el tambor de levantamiento. Sin embargo, sucede a veces que el piso no es el punto más bajo de la grúa. 
El gerente de seguridad e higiene debe buscar pozos o aberturas sobre los que la grúa aérea opera y que la ponen en riesgo de un peligroso desenrollado del tambor de levantamiento. "No ensilles un caballo muerto" es un dicho de seguridad familiar, que se refiere al montaje inadecuado de las abrazaderas de cable de acero en el que se emplean pernos en forma de U. Tal montaje de abrazaderas tiene cierto parecido a las sillas de montar, y el perno en U representa el cincho. Este perno fuerza más el cable de acero y tiene menos poder de sujeción que la abrazadera: por tanto, cuando se forma un lazo no debe ser colocado en la porción viva del cable. El extremo "muerto" del cable recibe el perno U, y el "caballo vivo" la abrazadera. Los métodos correcto e incorrecto aparecen en la figura 13.6. Con todo, algunos trabajadores, inseguros de cual es el método correcto, colocan las abrazaderas de ambas formas alternadamente, pensando que lo "están haciendo a la segura". Tal arreglo resulta aún más inseguro que "ensillar caballos muertos" con todas las abrazaderas.

viernes, 3 de enero de 2014

Cables y poleas - II

El término secciones del cable se refiere a la ventaja mecánica obtenida por el montaje de bloque y aparejo. Las secciones del cable se calculan contando el número de cables que soportan el bloque o motón de carga. Por supuesto, todos los cables integran uno solo continuo, enrollado en varias poleas para conseguir una ventaja mecánica. El concepto se explica mejor con una imagen; la figura 13.4 muestra cinco diferentes combinaciones de enrollados. Observe que la ventaja mecánica es equivalente numéricamente a la cantidad de secciones de cable. Una precaución adicional viene a cuento cuando se determina la carga máxima apropiada para una instalación dada de enrollado. El peso de la polea que lleva la carga debe agregarse al peso de ésta, para llegar a la carga total del cable. El peso del motón de carga no debe ignorarse, como se hace evidente en el enorme motón que se muestra en la figura 13.5. Nos valdremos del caso 13.1 para ilustrar los cálculos de la seguridad de una aplicación de enrollado de cable de acero.

jueves, 2 de enero de 2014

Cables y poleas - I

La norma de seguridad para la resistencia de los cables dice que "la carga nominal, dividida entre la cantidad de secciones de cable, no debe exceder en 20 por ciento la resistencia de ruptura nominal del cable". El término nominal implica que se ha aplicado un factor de seguridad, equivalente a cinco. que se deriva de la norma, como sigue:
Dado que la relación con la resistencia de la carga es de por lo menos cinco, el factor de seguridad es de cinco.