Como primera verificación en busca de problemas de ruido, el gerente de seguridad e higiene debe
caminar por la planta y escuchar. Como regla empírica, si usted puede tocar a alguien con su pulgar
pero no puede oírlo ni comprender su conversación (sin que tengan que gritarle), su sentido del oído
ya está dañado o defectuoso o bien en el área hay demasiado ruido. Si el ruido es continuo durante
todo el turno de trabajo, pero no es más fuerte que una aspiradora en funcionamiento, probablemente
no haya ninguna violación a las normas; pero si es tan fuerte como un tren subterráneo que pasara por
la estación continuamente durante todo el turno, es muy probable que haya una violación.
Si usted no
está familiarizado con los trenes subterráneos, imagine un tren de carga a toda marcha a seis metros;
tal nivel de ruido constituirá una violación, si la exposición es continua durante un turno de ocho
horas. Pueden ser permisibles algunas exposiciones superiores a la del tren, si son de corta duración,
como se hizo obvio en la sección precedente cuando calculamos el promedio de las exposiciones.
Cualquier nivel sonoro entre aspiradora y tren ocupará un área en intermedia que deberá ser medida
con instrumentos precisos.
La medición precisa de los niveles sonoros requiere de instrumentos como el medidor de nivel
sonoro (MNS), ilustrado en la figura 9.12, que registra la intensidad del sonido en decibcles. Se trata
de un instrumento delicado que hay que manejar con cuidado. La precisión es un problema, y el
gerente de seguridad e higiene no debe esperar un desempeño mejor a ±1 dB. La calibración es de
extrema importancia, y ningún medidor de nivel sonoro está completo sin un dispositivo de calibración (fuente de sonido conocida) cercano. Las variaciones en el nivel de la batería deben compensar-
se; además, las condiciones de humedad y temperatura pueden causar distorsiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario